Rutas en moto de agua: vive la Costa Blanca como nunca antes

Chico en moto de agua alquilada

Rutas en moto de agua: vive la Costa Blanca como nunca antes

Si estás buscando una forma dinámica y accesible de disfrutar del mar, el alquiler de motos de agua es la solución perfecta. Más que una tendencia, esta opción se ha vuelto habitual entre quienes desean experimentar la emoción del mar sin comprometer su presupuesto en la compra y el mantenimiento de una moto propia.  

Porque tienes la libertad de elegir cuándo y cómo disfrutar de la aventura, sin ataduras ni preocupaciones. Además, te permite explorar rincones de la Costa Blanca que de otro modo serían inaccesibles, dándole un giro único a tus días de verano. 

Ruta 1: De Altea a Calpe  

Bienvenidos, aventureros. Hoy nos embarcaremos en una ruta espectacular, ¡una verdadera joya de la Costa Blanca! Partimos desde Altea, un encantador pueblo costero conocido por sus casas blancas, calles empedradas y, por supuesto, sus hermosas playas. Pero hoy vamos más allá. Nos dirigimos hacia uno de los iconos más impresionantes de la región: el Peñón de Ifach, en Calpe. 

Nuestro recorrido empieza suave. Una vez que salgamos de la bahía de Altea, navegaremos a lo largo de su costa, donde se encuentran algunas de las calas más escondidas y menos exploradas. Te recomiendo que tengas la cámara lista, ya que este tramo está lleno de pequeños rincones donde las aguas son tan claras que puedes ver el fondo marino sin esfuerzo. A veces, incluso puedes encontrarte con bancos de peces plateados que se mueven en perfecta sincronización bajo tus pies. 

A medida que avanzamos, nos encontraremos con imponentes acantilados que se levantan sobre el mar, algunos de ellos alcanzan alturas que te dejarán boquiabierto. No es raro ver aves rapaces planear sobre estos acantilados, así que estate atento, podrías ver algún halcón o águila marina. 

Y ahora llega la parte emocionante: el Peñón de Ifach empieza a aparecer en el horizonte. ¿Lo ves? Esa gigantesca roca es conocida como “el gigante dormido” por su forma y es una de las reservas naturales más pequeñas de Europa, pero ¡qué impresionante es! Este majestuoso peñón de 332 metros de altura es el resultado de antiguas formaciones geológicas, y hoy es el hogar de más de 300 especies de flora, algunas de las cuales no se encuentran en ningún otro lugar del mundo. Además, si tienes suerte, podrás ver algunas de las aves que hacen de este lugar su hogar, como los cormoranes y las gaviotas. 

Aquí es donde nos detendremos un momento. Esta parada es perfecta para darse un baño rápido o practicar snorkel. Las aguas que rodean el Peñón de Ifach son cristalinas y suelen estar llenas de vida marina. No te sorprendas si ves pulpos o incluso pequeños bancos de peces nadando cerca de ti. Además, la vista desde el mar es simplemente impresionante. El Peñón parece elevarse directamente desde el agua, dominando el paisaje. 

Dato curioso: ¿sabías que el Peñón de Ifach era originalmente una isla? Con el tiempo, un istmo de tierra lo conectó al continente. Hoy en día, el Peñón se ha convertido en un símbolo de la Costa Blanca y atrae a miles de senderistas que suben hasta su cima. Desde ahí, las vistas son panorámicas, abarcando toda la bahía de Calpe y, en días despejados, incluso la isla de Ibiza en la distancia. 

Ruta 2: De Altea a la Isla de Benidorm  

Nuestro destino, la Isla de Benidorm, se encuentra a unos 20-30 minutos de navegación, dependiendo de nuestra velocidad y las condiciones del mar. En el trayecto, las aguas suelen ser tan transparentes que podrías avistar peces nadando justo debajo debajo de ti. Mantén la vista al frente: en esta zona a veces se avistan delfines juguetones que acompañan a las embarcaciones. 

Llegamos a una pequeña cala en la Isla de Benidorm, donde haremos una parada. Aquí puedes darte un chapuzón rápido o incluso practicar snorkel. Las aguas alrededor de la isla son cristalinas y el fondo marino está lleno de vida: peces de colores, pulpos y estrellas de mar son comunes en la zona. Es el lugar perfecto para hacer una pausa, refrescarse y disfrutar de la paz que ofrece este paraíso marino. 

Esta ruta en moto de agua alquilada a la Isla de Benidorm es perfecta para aquellos que buscan una experiencia que combine adrenalina, naturaleza y algo de historia. Es una aventura que te permite ver la Costa Blanca desde un ángulo diferente, lleno de emoción y belleza. 

Ruta 3: De Altea a Moraira  

Si buscas una aventura que combine velocidad, belleza natural y un destino encantador, entonces la ruta en moto de agua de Altea a Moraira es perfecta para ti.  

Nuestra primera parada es la Cala Moraig, una joya oculta entre acantilados abruptos que solo se puede acceder desde el mar o tras una caminata desde la costa. Esta cala es famosa por sus aguas de color turquesa y por ser el hogar del Cova dels Arcs, una espectacular cueva marina formada por la erosión del mar en la roca calcárea. Si eres amante de la aventura, puedes detenerte aquí para nadar o bucear y descubrir los pasadizos submarinos que se ocultan bajo la superficie. Se dice que esta cueva fue utilizada antiguamente por los contrabandistas, lo que añade un toque misterioso a la experiencia. 

Siguiendo nuestra ruta hacia Moraira, pasaremos por la hermosa Cala del Portet, otro paraíso escondido con aguas transparentes que invitan a hacer una pausa para nadar o practicar snorkel. Este pequeño rincón tiene un ambiente tranquilo y acogedor, perfecto para relajarse antes de continuar el viaje. Desde aquí, se pueden ver algunas impresionantes villas encaramadas en las colinas, ofreciendo vistas envidiables del Mediterráneo. 

El viaje de regreso a Altea nos permite disfrutar una vez más de las calas y las vistas, pero esta vez con la calma de haber vivido una experiencia inolvidable. Podemos hacer una última parada en alguna cala de nuestro agrado para darnos un chapuzón final, o simplemente relajarnos mientras sentimos el viento en el rostro y el sol en la piel. 

Consejos prácticos para disfrutar al máximo de las rutas en moto de agua 

Elección de la ruta según nivel de experiencia 

Si eres principiante, lo mejor es optar por rutas más cortas y sencillas, como la de Altea a la Isla de Benidorm. Este trayecto ofrece aguas relativamente tranquilas y distancias manejables para que puedas sentirte cómodo y seguro. Si ya tienes experiencia, puedes aventurarte en rutas más largas, como la de Altea a Moraira, donde tendrás más tiempo para explorar calas y disfrutar de una mayor velocidad sobre el agua. 

Equipo necesario y consejos de seguridad 

Asegúrate de llevar un chaleco salvavidas bien ajustado en todo momento. Se recomienda el uso de ropa cómoda y transpirable, preferiblemente un bañador o ropa de neopreno para mayor protección. No olvides las gafas de sol y protector solar resistente al agua. Además, mantén ambas manos en el manillar y respeta las instrucciones del guía o del alquiler, asegurándote de conocer las reglas básicas de navegación. 

Mejor momento del día para realizar la actividad 

Para disfrutar de las mejores condiciones del mar, lo ideal es salir temprano por la mañana o a última hora de la tarde. Durante estos momentos, las aguas suelen estar más calmadas y el calor no es tan intenso. Además, la luz suave de la mañana o el atardecer crea una atmósfera única que resalta la belleza de la costa. 

Las rutas en moto de agua por la Costa Blanca ofrecen una experiencia inolvidable que combina aventura, naturaleza y la oportunidad de descubrir rincones únicos del Mediterráneo. Desde calas escondidas hasta monumentos naturales como el Peñón de Ifach, cada una te permite disfrutar de la costa de una manera completamente nueva y emocionante. Tanto si eres principiante como si tienes experiencia, hay una ruta perfecta para ti. 

No pierdas la oportunidad de vivir la Costa Blanca como nunca antes. ¡Reserva tu próxima aventura con Rent a Boat y descubre la emoción de navegar por sus aguas cristalinas con el alquiler moto de agua!